La parte más molesta de sonreirle a un desprecio, no es el desprecio en si. Es más bien lo que te ahorras de decir, lo que de alguna forma con la sonrisa estas devolviendo. Y no es satisfactorio, sino simplemente molesto, triste. El ego emerge, la sonrisa se retuerce, deja de ser delicada, compradora, sutil. Simplemente pasa a ser una sonrisa soberbia, cuánto hay de mentira en la verdad que no te corresponde decir.
Oh babe, blue nails. ♥
Cuenten conmigo
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En la esquina. De la avenida. Espero que el semáforo cambie de color.
Espero que suelten los autos como si de una carrera de galgos se tratara. Y
empiezo ...
Hace 1 semana
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